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26 Jun 2023

La sanidad española ve en la geotermia una oportunidad para reducir sus costes y emisiones

La creciente conciencia medioambiental, ligada a la incertidumbre por la crisis energética, está propiciando que cada vez más instituciones y centros sanitarios españoles se sumen a la lucha por la reducción de emisiones, apostando por la geotermia como energía alternativa para ser más eficientes y para reducir su huella de carbono.

Y es que la Sanidad es una de las actividades que presenta un uso energético más intensivo, repartido casi a partes iguales entre electricidad (alumbrado, fuerza, refrigeración) y gas natural o gasóleo (calefacción y agua caliente sanitaria). Se estima que el consumo de un hospital medio puede oscilar entre los 500 y 1000 kWh por m2 al año y eso sin contar el transporte de pacientes y personal médico o la gestión de residuos médicos.

La geotermia enfocada a un uso sanitario está muy asentada en otros países europeos, pero poco a poco va ganando fuerza y notoriedad en España.

Un ejemplo de ello es el Hospital Doctor Peset de Valencia, que ha anunciado un proyecto geotérmico para beneficiarse del acuífero sobre el que se levanta, en el que el agua mantiene una temperatura constante de 14-15 grados. Para ello, realizarán un total de 288 pozos geotérmicos con bombas de anillo cerrado a una profundidad de 50 metros y en cada uno de ellos se introducirán tuberías con agua que forman parte de un circuito cerrado.

Gracias a la geotermia, este centro médico podrá obtener una potencia térmica de 3.100 kW, con la que obtener agua caliente sanitaria y climatizar todo un edificio (tanto para mantenerlo refrigerado, como para calentarlo), y todo ello sin depender del gas natural.

Otro proyecto reciente es el del Hospital de Mollet, perteneciente a la Fundació Sanitària Mollet, que contará con 148 pozos de 146 metros de profundidad y bombas de calor para reducir el consumo energético de climatización en un 30%.

El hospital va a comenzar con una primera fase en la que prevé hacer 16 pozos en la parte trasera del edificio que suministrarán una bomba geotérmica de 750kW. Una vez finalizada la primera fase, se pasará a instalar otra bomba de igual potencia para completar la sustitución del agua caliente. La climatización llegará gracias a otros 12 pozos geotérmicos y otra bomba de 1.600 kW.

Por último, el Servicio Canario de Salud (SCS) también va a invertir en geotermia para el Hospital Universitario Doctor José Molina Orosa de Lanzarote. El proyecto, que forma parte de la Estrategia Salud Zero Emisiones Netas 2030 del SCS para la prevención de los efectos del cambio climático, supondrá una inversión de 929.974€ (aunque será financiado con los Fondos Next Generation al 70%) y aprovechará la energía del subsuelo, con una potencia de 500 kW, para la producción de aire acondicionado, calefacción y agua caliente sanitaria para el centro, lo cual podría suponer un ahorro anual de más de 2.700.000 kWh de energía consumida (unos 729.000€ con la tarifa actual).

Y frente a estos proyectos, un ejemplo de éxito ya asentado, como el del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona. Ejecutado en 2017, sigue siendo uno de los mayores en Europa que usa la energía geotérmica para la climatización de edificios (calefacción y refrigeración).

El centro utiliza la geotermia de muy baja temperatura con bombas de calor de elevada eficiencia para la climatización, lo que permite integrar los beneficios de las energías renovables y la eficiencia energética en la rehabilitación de edificios históricos, proporcionando las necesidades de calor y frío de forma autónoma. Todo ello, además, sin impactar visualmente en las fachadas de los 12 edificios que componen el centro, declarado Patrimonio Mundial por la Unesco.

Hospital Doctor Peset (Valencia)
Hospital Doctor Peset (Valencia)
Hospital Universitari Mollet (Barcelona)
Hospital Universitari Mollet (Barcelona)
Hospital Universiario Doctor José Molina Orosa (Lanzarote)
Hospital de la Santa Creu i Sant Pau (Barcelona)

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